1. Define cuándo, dónde y cómo
Estas tres preguntas son las primeras que debes hacerte. Tener idea de la fecha, el lugar y el tipo de fiesta que quieres es el primer paso para encargarte del resto de los detalles. Piensa en la temporada de tu casamiento, decide si quieres algo al aire libre o en un salón de fiesta y considera si será algo grande con muchos invitados, o íntimo con tu gente de confianza.
2. Fija el presupuesto
Tu pareja, tu familia y tú deben estar alineados con el tema de los gastos. Si tú y tu prometido costearán la boda solos, fijen un precio tope de gastos y trabajen en base a eso. En caso de que vayan a recibir alguna colaboración, tengan una idea de cuánto se trata. Los preparativos para una boda están delimitados por el presupuesto.
3. Escoge tu vestido de novia
Recuerda que a veces ves un modelo que te gusta, pero luego te lo pruebas y resulta no ser lo que esperabas. Quizá lo compraste y haya que hacerle algunos arreglos. Escoge un modelo que te guste y te haga sentir cómoda, vete al espejo las veces que sea necesario y no descanses hasta estar satisfecha.
4. Haz las invitaciones
Las tarjetas de invitación son un detalle muy especial, es lo primero que verán los invitados. No es necesario que te apegues a lo convencional si no quieres. Invita como tú quieras, dale tu toque personal, es eso lo que cuenta. En internet y en las revistas verás muchas ideas, anota lo que te gusta y mézclalo con tu esencia.
5. Comparte las tareas
Recuerda que no tienes que hacerlo todo tú, ni trabajar sola en todo. Conversa con tu pareja, pregúntale su opinión sobre los detalles y compartan las responsabilidades. Pueden hacer una lista de tareas para cada uno e ir monitoreando como va todo, poco a poco.
Además, hay un ingrediente secreto que te hará la vida muy fácil: contrata organizadores de eventos. La agencia Doblezero tiene manos y mentes creativas que le darán ese toque mágico y único a tu gran día. Los preparativos para una boda son estresantes, sí, pero también son muy divertidos. Es un día emocionante y quieres que todo sea perfecto, es normal. ¡Todo va a salir bien!